Un día 13 de febrero de 1812 nace el periodismo chileno con la publicación semanal “La Aurora de Chile”
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El 24 de noviembre de 1811, proveniente de los Estados Unidos, la fragata Galloway atracaba en el puerto de Valparaíso. No era un viaje cualquiera, el barco traía una importante carga de municiones, armas y pertrechos para fortalecer las tropas independentistas. Sin embargo el arma más poderosa que desembarcaba ese día, no disparaba balas sino ideas: era una imprenta. La había hecho traer un comerciante sueco llamado Mateo Arnaldo Höevel, quien estaba comprometido con la causa de los patriotas chilenos. Acompañando a la máquina llegaban tres expertos en su manejo, los tipógrafos estadounidenses Samuel Burr Johnston, Guillermo H. Burbidge y Simón Garrison.
Todo había comenzado poco tiempo después de que se instalara la primera junta de gobierno, el 18 de septiembre de 1810, cuando el jurista Juan Egaña pidió la compra de una imprenta, cuyo propósito era crear una publicación en Chile para mantener un “contacto estrecho con la opinión pública”.
Mateo Arnaldo Höevel recibió el encargo de conseguir la máquina y a través de sus contactos, aprovechando su condición de ciudadano estadounidense, la mandó a comprar a los Estados Unidos.
¿Por qué Chile necesitaba una imprenta?
Hasta entonces nunca había existido una imprenta en nuestro país. Los periódicos llegaban desde Lima, Buenos Aires y desde España, con mucho retraso, debido a la lejanía geográfica.
Era necesario además reimprimir los libros y ensayos que movían el mundo, con el objeto de que ilustrar a la población. En ese momento todavía no existía consenso de la importancia de que Chile fuera una nación soberana, por eso los patriotas pretendían difundir las ideas emancipadoras y convencer a la opinión pública.
Un aporte significativo en esta línea lo constituía el proyecto de publicar, con la imprenta, el primer periódico de nuestro país, que se llamó con justa razón, “La Aurora de Chile”. Al difundir en sus páginas las ideas independentistas, este periódico se convirtió en un medio de gran valor en la lucha por consolidar la independencia.
Surge el primer periódico chileno
La Junta de Gobierno se puso a buscar sin demora a alguien que dirigiera la naciente publicación. El perfil que se quería era el de alguien que fuera “… adorno de principios políticos, de religión, talento y demás virtudes naturales y civiles, disponga la ilustración popular de un modo seguro, transmitiendo con el mayor escrúpulo la verdad que sola decide la suerte y crédito de los gobiernos…”. En otras palabras, se quería designar a una persona muy correcta, no sólo desde el punto de vista intelectual sino también que representara los más sólidos valores morales de la época. El 16 de enero de 1812 se eligió formalmente a Fray Camilo Henríquez. Este se puso a trabajar enseguida junto a los tipógrafos estadounidenses.
El 12 de febrero de 1812, a menos de dos meses de la llegada de la imprenta, apareció un “prospecto”, o ejemplar de prueba, de “La Aurora de Chile”. Al día siguiente, jueves 13 de febrero de 1812, comenzó a circular el primer ejemplar oficial.
¿Qué publicaba La Aurora de Chile?
El periódico publicaba noticias de actualidad comentadas por Camilo Henríquez, junto a ensayos y artículos sobre las ideas filosóficas más avanzadas de la época, con autores como Rousseau y Voltaire entre otros. Camilo Henríquez escribía también vigorosas columnas a favor de la libertad e independencia, junto a personalidades como Bernardo de Vera y Pintado, Antonio José de Irisarri, José Manuel Gandarillas y Manuel de Salas. Todos ellos defendían los ideales democráticos como una manera de aspirar a un futuro mejor, y estaba en contra de la monarquía. También se publicaron escritos y discursos de los independentistas norteamericanos como George Washington y Thomas Jefferson.
La Aurora de Chile aparecía todos los jueves, y duró hasta el 1 de abril de 1813.
A pesar de que hoy suena ridículo, había personas dentro del mundo político que estaban convencidas de que lo mejor para Chile era seguir siendo colonia española, y presionaron para cerrar La Aurora de Chile, que fue finalmente reemplazada por otra publicación: “El Monitor Araucano”.
- Si quieres saber más, visita el sitio La Aurora de Chile.
fuente: http://m.educarchile.cl/portal/mobile/articulo.xhtml?id=214027
